Del género femenino, nací en Brasil el 11/11 a las 11 de la mañana, viví en São Paulo, Minas Gerais, Florianópolis y Nueva Zelanda, y ahora mi camino sigue en Argentina. Me gradué y trabajé como diseñadora de moda hasta que tuve una experiencia reveladora en la que entendí que mi verdadero camino era como artista.

Luego de un largo proceso de liberación personal, años de meditación e introspección, en los que utilice técnicas muy variadas de autoconocimiento y sabidurías ancestrales, logré re-conectarme con lugares muy profundos de mi interior, conectando cada día más mi esencia.

Hoy entiendo el arte como una manera sagrada de canalizar algo que ya existe en un plano superior, siendo el subconsciente humano el punto de conexión entre lo divino y lo material. Cuando pinto siento como el ego se hace a un lado y esas imágenes subconscientes simplemente fluyen a través mío.

Comprendí que la creatividad es el pulso mismo de la vida, lo que crea, y que todo lo que podemos hacer en este mundo es usar ese potencial creativo para materializar todo lo que se encuentra inmerso en ese gran océano misterioso del subconsciente.

Hoy, con 10 años de recorrido en el camino rojo, la mitad de ellos de acercamiento a las personas como terapeuta / mujer-medicina, pongo a disposición de todo aquel que así lo desee, lo que aprendí durante todos estos años, simplemente acompañando y dando apoyo amoroso para despertar ese potencial creativo que existe en cada ser humano. Acostumbro a decir a mis pacientes que mi servicio es ser la mano dada que nunca se suelta en el sumergirse diario de los misterios profundos del Ser.